Que cada persona que sufre por haber participado en un aborto encuentre perdón, esperanza y sanación en Cristo.

 

INVOCACIONES

Padre nuestro, 3 Ave Marías, Gloria…

 

REFLEXIÓN

Se ha puesto fin a la vida de innumerables niños a causa del aborto, e incontables padres y familiares sufren culpa, dolor y arrepentimiento, a menudo en silencio. Sin embargo, el mayor deseo de Dios es perdonar. No importa lo lejos que nos hayamos apartado de su lado, él nos dice: “No tengas miedo. Acércate a mi corazón”. Puedes estar seguro de que nunca es demasiado tarde para buscar el perdón de Dios en el sacramento de la Reconciliación. 

Consideremos la parábola del hijo pródigo. Después de arrepentirse de pecar contra su padre, regresa de lejos para buscar perdón y trabajar como sirviente. Pero su padre lo ve aproximarse, corre a abrazarlo cálidamente y organiza un banquete para celebrar su regreso. Así también Dios acoge a todos sus hijos que se acercan a Él en el Sacramento de la Reconciliación con un corazón contrito, sin importar lo grave que sea el pecado. Volvámonos con confianza a Nuestro Señor, que es amor y misericordia.

 

ACTOS DE REPARACIÓN

Abstente de comer carne hoy.

Reza la Coronilla de la Divina Misericordia por la intención de hoy.

 

ORACIÓN

Padre celestial, gracias
por el preciado don de la vida.

Ayúdanos a valorar y proteger
este don, incluso si hay temor,
dolor y sufrimiento.

Danos amor por todas
las personas, en especial los más
vulnerables, y ayúdanos a dar
testimonio de la verdad
que toda vida merece vivir.

Concédenos la humildad de
aceptar ayuda si la necesitamos,
y enséñanos a ser misericordiosos
con todos.

Que otros encuentren
por nuestras palabras y acciones,
el abrazo de Tu misericordia.

Te lo pedimos por Cristo,
nuestro Señor.

Amén.