Tercer día

Protector de la Santa Iglesia

Por la señal de la Santa Cruz +
de nuestros enemigos +
líbranos, Señor, Dios nuestro +
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo +

Oración inicial:
San Miguel Arcángel, ruega por todos nosotros. Protégenos de todos los peligros del cuerpo y del alma. Ayúdanos en nuestras necesidades diarias. Que a través de tu poderosa intercesión, podamos vivir una vida santa, una muerte feliz y alcanzar el cielo, donde podamos alabar y amar a Dios contigo por toda la eternidad. Amén.

Lectura bíblica del tercer día:
“En aquel tiempo, se alzará Miguel, el gran príncipe, que está de pie junto a los hijos de tu pueblo” (Daniel 12, 1).

Reflexión:
Para la Iglesia, san Miguel es el patrón y defensor universal de la humanidad frente al mal. Lo venera como guardián y protector dado por Dios. Es nuestro custodio, y para cumplir esta misión es necesaria, además de la del poder, otra cualidad: la bondad. Su bondad, es tan grande como su poder. Bajo sus órdenes, todos los ángeles trabajan por la protección de todos nosotros.

Pedir la gracia que se desea alcanzar de san Miguel Arcángel en esta novena.
(Padre Nuestro, Ave María y Gloria)

Oración final:
Señor Nuestro, Jesucristo, dígnate santificarnos con una bendición siempre nueva y concédenos, por la intercesión de san Miguel Arcángel, la sabiduría que nos enseñe a procurarnos tesoros para el cielo y a cambiar los bienes de la tierra por los de la eternidad. Tú, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén +