¿Qué significa la Sede Vacante en la Iglesia Católica?
Con la muerte del Papa Francisco, la Iglesia Católica entra en un periodo conocido como Sede Vacante, expresión en latín que significa “silla vacía”, refiriéndose a la Cátedra de San Pedro.
Durante este tiempo:
No hay Papa. La Iglesia queda sin su pastor supremo, aunque sigue activa y guiada por el Espíritu Santo.
Se suspenden las decisiones importantes. Ningún cambio mayor ni acto reservado al Papa puede realizarse.
¿Quién gobierna en este periodo?
El Colegio de Cardenales se encarga de asuntos ordinarios, pero sin tomar decisiones trascendentales.
El Camarlengo (actualmente designado) se ocupa de la administración temporal del Vaticano, certifica la muerte del Papa, sella sus aposentos y organiza los funerales y el Cónclave.
¿Qué sucede en estos días?
Se realizan las exequias del Papa. Se convoca el Cónclave, donde los cardenales electores se reunirán para elegir al nuevo Sucesor de Pedro.
La Iglesia vive este tiempo en oración, pidiendo al Espíritu Santo que guíe la elección.
Un tiempo de esperanza
Aunque se vive con cierta incertidumbre, la Sede Vacante es también un periodo de gracia y confianza en que Dios nunca abandona a su Iglesia.
Oremos por el Papa Francisco, por la Iglesia Universal y por quien será llamado a ser nuestro próximo Pastor.