Día 24

1. Inicio
Ven Espíritu Santo,
llena los corazones de tus fieles
y enciende en ellos el fuego de tu amor.
Envía tu Espíritu
y serán creadas todas las cosas,
y renovarás la faz de la tierra.

¡Oh Dios, que has instruido
los corazones de tus fieles
con luz del Espíritu Santo!,
concédenos que sintamos rectamente
con el mismo Espíritu
y gocemos siempre de su divino consuelo.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
Amén.

2. Lectio ¿Qué dice el texto?
Lc 9, 43-45

En aquel tiempo, como todos comentaban, admirados, los prodigios que Jesús hacía, éste dijo a sus discípulos: “Presten mucha atención a lo que les voy a decir: El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres”.

Pero ellos no entendieron estas palabras, pues un velo les ocultaba su sentido y se las volvía incomprensibles. Y tenían miedo de preguntarle acerca de este asunto.

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Cada uno de nosotros, explicó, «puede tal vez pensar: ¿a mí qué me sucederá? ¿Cómo será mi cruz? No lo sabemos, pero estará y debemos pedir la gracia de no huir de la cruz cuando llegue. Cierto, nos da miedo, pero el seguimiento de Jesús acaba precisamente allí. Me vienen a la mente las palabras de Jesús a Pedro en aquella coronación pontificia: «¿Me amas? Apacienta…. ¿Me amas? Apacienta… ¿Me amas? Apacienta» … Y «las últimas palabras eran las mismas: te llevarán allí donde tú no quieres ir. Era el anuncio de la cruz». (Homilía del Papa Francisco en Santa Marta, 28 septiembre 2013)

3. Meditatio: (Escucha atenta) ¿Qué te dice el mensaje del texto para tu situación actual?
Los discípulos no estaban preparados para la Pasión de Jesús. ¿Estamos nosotros preparados para la pasión que tanta gente vive cada día? Necesitamos una nueva manera de ver. Cuando estamos a punto de ser quebrados por el conflicto, Jesús camina mucho más cerca de mí, a mi lado. Nos da el coraje para dar un paso más.

4. Oratio: Responde al Señor. Conversa con Él.
Padre del Cielo y de la tierra, que no abandonas nunca la obra de tus manos, te pedimos alejes de nosotros todo temor, para que viviendo en la plenitud de tu amor sepamos dar testimonio de tu bondad y así nos hagamos creíbles ante los hombres.

5. Contemplatio: Déjate animar por el calor de la palabra.
Pongan en sus oídos estas palabras. Dios tiene un plan, solo falta saber escuchar y actuar.

6. Actio: Márcate un propósito o compromiso para este día.
Rezar una oración por el día de mi muerte porque solo Dios conoce el día y la hora que estaremos en su Presencia.